jueves, 28 de junio de 2007

Sotto il Sole Toscano




Para Lika...



Mientras más huía más se encontraba, y eso no implicaba nada bueno a la hora de tomar decisiones drásticas. Quién sabe; se dijo, quizás algún día tome la iniciativa correcta. Pero con esta cantidad de pesadillas jamás lograré enfocarme. Puede que yo misma sea el problema.


Escúchame bien, le dijo su amiga que la oía atentamente desde un banco: "las cosas generalmente no suelen ser como los sueños, tienden a aplastar la misma realidad, o al menos, como dicen por ahí, a despertarte más de la cuenta.

Quizás cuando todo esto termine y afloren nuevos campos, un buen viaje será la tónica de ambas. Te imaginas alguna vez nos encontramos en Grecia, o en Francia?


- Es cierto, no lo había pensado de ese modo. Por ahora, en todo caso, quiero estar así porque me canso.


Lo imagino, por eso dejo esta situación en manos de quienes realmente saben de estas cosas


- de quiénes?


ya verás...



Sotto il sole toscano



Una película sencilla, campestre, de esas que uno sabe son no comerciales ni menos caras. La útima vez que aprecié una así fue con Amélie... Under the tuscan sun es una manera muy romántica de ver la vida y las relaciones interpersonales. Pero se concreta en algo más: la vida de la estadounidense Frances... comienza de modo casi mágico cuando se le aparece esta casona antigua, abandonada en el campo, alejada de todo mundanal ruido, y a unas horas de Roma. Frances viaja porque su mejor amiga le regala un pasaje a Italia con todo pagado... ya que ha sufrido una irreconciliable pérdida: su esposo tiene otra mujer, y prácticamente la dejó en la calle al pedir la venta de la casa donde residían juntos. Frances, por tanto, en un ataque desesperado por el momento oscuro que está viviendo, decide hacer este viaje de regalo.


Toscana se presenta maravillosamente, con unos colores fabulosamente ocres, un aire de Italia antigua, la del Renacimiento, personajes utópicos como Katherine, la italiana sibarita, ícono del cine de Fellini. Un amigo adolescente, que al ser polaco no es admitido por la familia de su joven amada. El nexo entre Frances y el resto de los personajes es tan espontáneo como la compra de esa casona inmensa y casi derruida.


Mientras la casa empieza a adquirir toques modernos, la cocina comienza a ser ocupada por la dueña, hay visitas, todo recobra vitalidad. No sólo el rostro de Frances, sino también su entorno. Incluso los colores ocres se tornan más brillantes, los trajes más blancos y las flores crecen con facilidad.


Esta película no está dedicada a la gente hiperrealista, ni menos a las personas que gustan de existencialismos. Más bien toma fuerza y valor cuando es apreciada por gente esperanzada, sensible y más aún: cien por ciento afectiva.



Qué ganas de conocer Toscana!, verdad Lika?


lunes, 25 de junio de 2007

Here's where the story ends




Pensé que las cosas estaban terminadas, pero la vida me sugiere a cada instante un flujo incesante, algo así como los ciclos tan manoseadamente hablados, esos clichés típicos donde aparecen cosas que revuelven recuerdos y te hacen temblar de lo puro ciertos que son.
Quedan unos meses para que me vaya, me aventure a algunas cosas, despierte nuevamente los sentidos como una niña, pero curioso! no lo soy, y sin embargo, el sólo hecho de saberme nuevamente en parajes desconocidos o incluso reconocibles, me estremezco por completo. Parezco efectivamente una infantil criatura a la que le darán la oportunidad de nuevo de saber que el mundo es tan bello, abierto, inimaginablemente enorme, diverso, con un sinnúmero de olores, sabores y colores que sólo por algunas veces en la vida tenemos el provilegio de percibir. La mía ya no es primera vez, y debo ser franca... me asumo adulta en este redescubrimiento del cosmos. Qué amable se me ha vuelto el mundo, las sustancias, volver a oír ciertos grupos musicales que escuchaba con mi amiga de pieza en la noche, las conversaciones que jamás volveré a tener y los silencios que no compartí, tampoco los viviré de nuevo. Suena... insisto, a cliché, pero uf! ... cierto es que la vida es única, de instantes irrepetibles, y ahora me asomo a la ventana de una nueva aventura. No quiero perderme por nada del mundo este periplo, ya no estoy sola, no caminaré del vacío o hablándome y susurrando cosas al aire... ahora iré para reencontrarme con él.
"People I know, Places I go Make me feel tongue tied I can see how people look down They're on the inside  Here's where the story ends  People I see, weary of me Showing my good side I can see how people look down I'm on the outside  Here's where the story ends Ooh, Here's where the story ends  It's that little souvenir of a terrible year Which makes my eyes feel sore Oh I never should have said the books that you read Were all I loved you for It's that little souvenir of a terrible year Which makes me wonder why And it's the memories of the shed that make me turn red Surprise, surprise, surprise  Crazy I know, places I go Make me feel so tired I can see how people look down I'm on the outside  Oh, Here's where the story ends Ooh, Here's where the story ends  It's that little souvenir of a terrible year Which makes my eyes feel sore And who ever would've thought the books that you brought Were all I loved you for Oh the devil in me said go down to the shed I know where I belong But the only thing I ever really wanted to say Was wrong, was wrong, was wrong  It's that little souvenir of a colorful year Which makes me smile inside So I cynically, cynically say the world is that way Surprise, surprise, surprise, surprise, surprise"
Here's where the story ends (Sundays)... altamente recomendable
Modalidad: jaqueca en bajada


lunes, 18 de junio de 2007

Noticias de último momento...





Un día se hizo tarde, nada podía arreglarse

se supone - digo se supone porque nunca se sabe - todo estaba perdido
hasta que llegó el señor C.
Cuando inventó el proceso de remordimiento se acumuló tanta gente que la cola era inmensa... pero ahí estaba firme, la gente agazapada a la pared.
Para descansar un rato la espalda esperaba fielmente para ingresar a la máquina de arrepentidos y liberar culpas e irresponsabilidades en vida.

El señor C. un día dijo:
"cuidado, no vaya a ser que esta cosa explote y las culpas nuevamente se liberen. Mejor traten de encargarse ahora de estos asuntos y no procesar tantos después, o sino, no alcanzará para el resto"
La gente rió, y nadie hizo mayor caso.
El día que fue la explosión, medio mundo lloraba y la otra mitad moría.
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Este cuento fue narrado por Un padre a su hija el día segundo del mes cuarto, año de mil docientos treinta, en una casa agreste, donde la soledad era bienvenida, la naturaleza aún daba respiros y la gente no tenía mayores culpas que cazar o creer en demonios menores.

domingo, 17 de junio de 2007

Amistad incondicional

Te propongo lo siguiente:
Mira hacia abajo pero no te muevas porque puedes caerte.
Tómate la mitad del helado y yo me como el resto.
Corre lo más rápido posible mientras toco los timbres de las 10 casas.
Dile a tu mamá que estás en mi casa y sales con él.
Experimentemos, qué tal una fusión? pero en tu cocina eso sí.
Mmmm, deja pensar, ya! me quedo en tu casa y hacemos espiritismo.
Ay! no me uses ese vestido, lo iba a ocupar yo hoy en la noche.
Te gusta el mismo niño que a mi... pero no te preocupes, que no haré nada. Tú sí?
Amiga, me dio hambre, lo siento pero no necesito hacer dieta, perdóname ya?
Pero si le dije a tu mamá que estabas acá, lo que pasa es que yo también salí por mi cuenta, y claro, mi papá le contó que yo andaba en un lado y tú en otro pero que no sabía si estabas con ese chico llamado X que va en el 3º biólogo y que vive a dos cuadras de tu casa, donde los papás son tan estrictos como los tuyos y posiblemente los castiguen a ambos, cosa que a él, por supuesto, no le va a gustar y terminará contigo esa linda aventura que iban a empezar.

Te quiero, lo sabes, pero no puedo estar contigo si mi pololo me viene a buscar de repente.
Ya estamos grandes para juntarnos tanto, por qué no te consigues un mino? yo te busco.
Estás linda, lo que pasa es que te has descuidado un poco. Pero en el fondo eres muy linda.
Te juro que alguien se va a fijar en ti.

ESTOY EMBARAZADA, qué hago? le cuento?
no sé qué hacer, eres la única en quien confío.
Tienes dinero? es que no tengo nada y me echaron de la casa. Mis papás no me quieren ahí con la bebé.
Ten en cuenta tantos años unidas. Sé que no me porté bien contigo al final pero la gente cambia mucho. En todo caso siempre te he querido y te tengo en mi corazón. Y como has tenido buen empleo y sueldo... no creo que te cueste tanto...
te pagaré el mes próximo la cuenta del teléfono y del gas. Perdona, sabes que te quiero mucho.
Ay! muchas gracias por acogerme en tu nuevo departamento. Se nota que te ha ido bien, me alegro tanto por ti. Puedo ocupar tu ropa verdad? es que estoy más delgada y sé que me queda bien.

Oye, es tu pololo? ahhh! tu novio? así que te vas a casar... qué emocionante
has pensado alguna vez en que salgamos él, tú y yo a algún lado? es que me siento sola acá.
La bebé mete tanta bulla, apenas salgo, no duermo nada.
No te preocupes, yo me quedo y le cocino, tú anda a la reunión.

Tu vestido me queda genial, además, me siento mucho mejor ahora que mi busto creció y ahora tengo sostén para hacerlo notar.
Tu novio me dijo que yo era linda, qué amoroso verdad?

Gracias por hospedarme en tu departamento, con Tito y la niña seremos felices en otro lugar.
Sé feliz, no te mereces a alguien como él, la vida te enseñará a no confiar en este tipo de hombre. A mí ya me pasó la cuenta, ya tengo una hija, y bueno, es lo que merezco. Perdona amiga, pero es la verdad.
Y ya sabes... la amistad, la amistad... es tan relativo todo, ya sabes, las necesidades, la vida hace que uno cambie. Perdóname, pero tú sí eres la incondicional y sé que ya no quieres, es obvio, ser mi amiga, no sufras por favor, él te quiso, me dijo que sí pero quería cosas distintas, no lo sé... y una no es de fierro... tengo carencia afectiva, ya me conoces... sé que alguna vez me perdonarás.
Gracias por ser mi amiga tantos años. Adios.
"Antes de que salgas de mi vida, necesito hacer mis descargos: como imaginaba este final, me preparé tanto que hice lo siguiente: yo le dije a tus padres que te habías embarazado, le avisé a tu ex y padre de la guagua que habías contraído el Sida y le dije a mi ex - que a todo esto nunca fue tal - (que ahora está contigo) que eras muy fácil, tanto que cuando él quisiera se podía ir y volver porque tú lo permitirías. Por lo demás, no estoy enamorada de él, estoy comprometida con otro, que obvio no te presentaré, quien vivía a mi lado es mi mejor amigo gay, o bisexual, da igual, y bueno, si pensabas que sufriría por tu causa, muy lejos de la razón estás. Así que, amiga, te agradezco a ti el confiar tan ciegamente en mi ingenuidad e incondicionalidad, porque te mereces esto y mucho más. Buena suerte en la vida".


Dedicado a D. Veas M.

miércoles, 13 de junio de 2007

Ensayos


Son cientos de ellos, amontonados esperando a que los lea... uno por uno. Lo obsesiva compulsiva no se me quitará jamás, por lo tanto, sé (asumidamente) que ahí empieza lo primero. Mañana me levantaré y probablemente, como casi todos los días, me costará un mundo estirarme para que se me quite la modorra. Trataré de hacer leso al reloj, pero mi reloj me molestará como un mosquito hasta que me levante. De ahí, sí, la pastilla que no debo olvidar de la tiroide (para que funcione y cumpla ese rol de hacerme sentir que tengo hormonas para algo!!! diantres!). El sólo hecho de pensar poner mis pies en las pantuflas, dirigirme al baño, buscar un vasito de agua y morir de frío en el intento me hacen titubear - bueno, como siempre ¿cuál es la novedad? - de mi resolución interna.
Llegados los minutos necesarios (diremos minutos para presumir responsabilidad), me mojo la cara, lavo mis dientes, cojo el diario, leo - pero alguien no me dijo que la estufa no estaba prendida abajo!!! - y bajo la escalera. Mientras, la Naty me mueve la cola compulsivamente, no sé si quiere orinar o simplemente subirse a mis piernas para regalonear un rato como buena perragata que es.
Mi mamá probablemente no estará, así que miro la cocina con cara de hum! no hay leche. Tengo que ingeniármelas para abrir cereales, aguar el yogurt, pelar con mucha flojera la fruta (rica por cierto... las manzanas Fuji la llevan!), y mezclar todo. El deleite no está en comer, sino en subir nuevamente la escalera, buscar mi pc, mis lentes, bajar con ellos, leer, escuchar música, tomar desayuno, y sentir que algo está comenzando con el pie derecho, por mucho que mi lado de la cama sea el izquierdo... lo sé, es metáfora.
Así que, de ahí, se suman las cosas cotidianas, las sorpresas (llamadas telefónicas de todo tipo: laborales, para mi papá, mi mamá, que es mi tata, que alguien se equivocó de número, llamadas a mi celular, la señora de las plantas que quiere copuchar un rato con mi mamá, y como no está ella, aprovecha y me larga la historia terrible de su vida, y ahí, estoy, media hora más, intentando quizás... digo quizás, ojo!, subir para bañarme), actividades que debo y no debo hacer, etc.

Cómo llegué hasta esta situación?, ah sí!... LOS ENSAYOS me llaman a leerlos, uno por uno

martes, 12 de junio de 2007

Mal Presagio

La nave surcó los aires como un cohete en reacción a un ataque terrestre. El joven coleccionaba estampillas siderales y comía las barras de cereales más originales que se pudieran concebir. Partía diciendo: de esta agua no beberé, debido a un sinúmero de infecciones y bacterias que a más de algún compañero de equipo le causó problemas estomacales.
Oh! Mira cómo se ve desde acá la Tierra!! señalaba mientras se sumergía en un hueco de la nave y se agazapaba como niño embobado viendo su primer juguete. "Como te darás cuenta estamos a miles de kilómetros de distancia, y ya no hay mucho que hacer, simplemente comes y duermes lo que tengas que descansar. Atravesarás momentos de soledad y quizás más de alguna vez querrás bajar, pero no te preocupes, aquí estaré para protegerte y tirarte un cable a tierra jajajaja", decía el orientador con su voz irónica, mientras el otro lo oía atentamente atemorizado por semejantes palabras llenas de humor, pero llenas de verdad, una triste verdad.
Pasados unos años el nuevo tripulante adquirió las costumbres del resto, subía a la plataforma cuando debía, no hacía muchas preguntas, comía lo que le daban y, claro, esos "momentos de soledad y desesperación" ya empezaban a hacerse muy llevaderos. Un día, cuando los otros estaban en el turno del comando, se agazapó como su orientador, miró por la ventana, y se dio cuenta de que la Tierra estaba muy cerca. Sus ojos asombrados, la boca abierta y el aire ralo que pasaba de repente por las turbinas inventadas, comenzaron a provocarle una sensación de esperanza, la cual - pensaba - había muerto hacía tiempo.
Con el dedo apuntó tímidamente esa bola de agua y tierra, la añoraba - lo sabía internamente - más de lo que presuponía. Mientras se acurrucaba más y más soñando con los ojos abiertos a volver a ver a su familia, a tocar con los pies el agua del mar, seducir a alguna muchacha de su barrio, formar una familia, comprar en el negocio de la esquina, tocar los árboles, comer la rica fruta que compraba su mamá cuando pequeño... recién ahí, se dio cuenta del daño.
Su orientador se acercó silenciosamente por detrás, le susurró algo al oído, y el joven se levantó. Se miraron fijamente, como si hubiera pasado mucho tiempo que no se veían:
-"Te dije, el cable a tierra lo tiraré cuando menos lo esperes... y veo que lo necesitas"
-"¡Quiero volver!"
-"Ja ja, ¿ahora?"
-"Sí, ahora mismo"
-"Lo siento, pero al parecer tendré que meterte el maldito chip a la cabeza para hacerte memoria, ése será tu cable a tierra. Resulta que cuando tenías 17 años, te reclutaron para formar parte de un equipo interdisciplinario que buscara soluciones intergalácticas y condiciones de vida en otras esferas. La Tierra hace muchos años que ya no existe como tal, se podría decir que está casi colapsada. No quedan ni el oxígeno suficiente, ni agua, ni minerales que solventen tu sobrevivencia allá. Tu familia está enclaustrada junto con otras miles - porque ya no hay millones, sino miles - bajo la tierra, tratando de pensar que nosotros aquí arriba lograremos algo. Y tú, caíste en una especie de locura espacial, tuvimos que doparte, hablarte y educarte prácticamente de nuevo para que asumieras el rol que te correspondía: ser el pionero en la educación y formación de los primeros hombres en otro planeta. Posees ua inteligencia única y por eso te escogimos, pero veo que ahora, justo ahora nos estás fallando"
-"No sé de qué me hablas y todo esto parece sacado de cualquier cosa menos de la realidad"
-"¿quieres realidad? Mira hacia la ventana, ve bien... te suplico, ve bien esa pelota incolora y seca, y dime qué es lo que efectivamente VES!"

Se acercó a la ventana, con un temblor de piernas que casi no podía avanzar, miró fijamente ese elemento esférico, y cayó en la cuenta, la horrorosa cuenta de lo cierto: no había verde, no había azules, no había matices, sólo ciertos gases, grises, y uno que otro hoyo en espera de agrandarse.
El daño ya estaba hecho.

-"Esto sí que es mal presagio", pensó para sí, mientras se volteaba hacia su orientador para seguir con la rutina de comando, pues ahora era su turno. Y eso, no lo había olvidado.

domingo, 3 de junio de 2007

Lo que pasó cuando no estabas

Mientras recorría los pasajes llenos de aire fresco, juraba que te encontraría por ahí, corriendo a lo largo de la calle, mirando a campo traviesa algún gato que pasaba inadvertido
Pensé que quizás no me verías; te diste vuelta, sonreíste y seguiste tu trote. Acerté y no fue ese día.

Cuando no estabas, soñé contigo, pensé una y mil veces en que no podía contactarte, algo pasaba, habían tantas personas entremedio que no lograba enfocarte... ni menos tú a mi.

Prendí la luz del baño, estaba todo tan oscuro que de negro me dio frío. Miré el corredor y mis pies estaban pegados como raíces al suelo, y nuevamente pensé en el posible encuentro.

Cuando no estabas, alguien una vez me invitó a un lugar en la noche, era un cumpleaños y todos bailaban... todos excepto yo, porque de alguna manera me sentí llamada a bajar esa escalera de caracol, toparme con gente que más adelante vería a menudo, y ahí estabas... parado, con amigos, segundos de armonía.

Cuando no estabas, llegué un día a sentarme al sillón de las comunicaciones, alguien me hablaba, pero yo sólo me fijé en algo a través de la pantalla: una foto donde aparecía una sonrisa única, gatuna, sincera... los ojos de ese muchacho traspasaron mi propia mirada, y ... recién ahí supe que eras tú.

Al Fin llegaste!!!